(LPR).- Los medios de comunicación comerciales en Venezuela han realizado desde la asunción de Hugo Chávez, y principalmente a partir del fallido Golpe de Estado de 2002 una campaña de desestabilización constante al proceso bolivariano. Hace ya dos años, luego de varias irregularides, al vencerse la licencia de RCTV, el Estado venezolano ejerció su legítimo derecho y no le renovó el permiso (como sucede en todos los países del mundo). De todos modos, la cadena televisiva Globovisión ha sido, quizá, la emisora que más fuerte influenció en las clases medias venezolanas apelando al descrédito de la democracia bolivariana.
Ya Globovisión puso sobre la mesa sus intereses políticos y económicos, especialmente por el apoyo que le brindó al fallido golpe de estado de 2002 y por su sistemática tendencia a crear pánico e histeria en la población. El pasado 4 de mayo, nuevamente la empresa comenzó sus operaciones de prensa cuando, a raiz de temblor sísmico comenzaron a circular falsas información y difamaciones.
El fenómeno ocurrido en la localidad de Los Teques (de 5,4 en la escala Richter), y que llegó a sentirse en la capital Caracas fue la excusa para que el director de Globovisión, Alberto Federico Ravell se apresurase a salir al aire telefónicamente, dando recomendaciones incorrectas a la población, y que generó tumultos en los edificios. Todavía no había dado tiempo al gobierno a comunicarse que desde la emisora ya se denunciaba que el gobierno de Chávez no estaba a la altura de la circunstancias.
Este hecho motivo que la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (CONATEL) tomase cartas en el asunto e inicie un expediente administrativo a Globovisión por instigar al pánico. En caso de que la Justicia apruebe las acusaciones del organismo, la multa podría ir desde una suspensión de emisión por 72 horas hasta la quita de la licencia. Como era de esperar, las cadenas comerciales acusan al gobierno de silenciar a la prensa aunque olvidan contar las causas que motivaron las acciones legales.
En este contexto, en el que también el ya nombrado Ravell fue sorprendido con 24 autos lujosos que no pudo justificar en su patrimonio, en el país latinoamericano se encuentra desarrollada una fuerte red de comunicación popular. La contrainformación, es un proceso que ha nacido tanto de las organizaciones sociales como desde el mismo Estado. El Colectivo Voces Latentes es un grupo de comunicadores de Venezuela, y abordan, además, temas relacionados con la Comunicación en nuestro país.
Modelo de comunicación en Venezuela
Preguntados sobre cual es el panorama de la comunicación en su país, el Colectivo Voces Latentes plantea que el nacimiento del modelo alternativo mediático a partir de 2002 cuando estos medios hicieron visible el momento político y represivo de la instauración de la derecha en el poder, "el Golpe de Estado que los medios privados no llamaban como tal y que incluso hubo un gran silencio con lo que pasaba en el país, los medios comunitarios tomaron y difundieron la voz del pueblo".
"Los medios comunitarios se legitiman socialmente, como espacios organizativos comunitarios". Allí, cuentan, participant centros cultrales, organizaciones sociales, los colectivos comunicacionales, las agrupaciones políticas, deportivas y los comités de salud. Los medios comunitarios hay que entenderlos, sostienen, "a partir del proceso político que se viene dando en Venezuela, revolucionario, de transición hacia el socialismo del siglo XXI"